MIA. MIA.

Nena, este ha sido un año intenso, de caer, de levantar, de animarse y encontrar lo que es, lo que verdaderamente es la esencia del ser y de estar. Este camino lo empezaste sola, asustada y confundida, no más. Me tienes a mí de punching bag, de hombro para llorar, de consejera, de confidente y de aprendiz. Te quiero feliz, completa. Paciencia nena, mucha paciencia. Ya te diste cuenta que no existe la magia, existe lo humanamente posible, el paso a paso y poco a poco. Esperar ha valido la pena y seguirás avanzando porque estoy segura que lograrás tus metas y que tendrás tus periodos felices. La felicidad no es la meta, es el estado del camino y vaya que hemos tenido grandes tropiezos, sobre todo yo, que hemos de seguir superando. Mis culpas se han ido diluyendo en el conocimiento de lo que ignoraba, en el subsanar los errores del pasado por esa ignorancia inocente sin mala leche. Te amo como eres, amo quien eres, admiro tu sabiduría y lo inteligente que eres. Me vas superando y a fin de cuentas, de eso se trata la vida, de evolucionar y de aprender a enfrentar los retos y sinsabores que la vida trae tatuada. Paciencia, nena. Paciencia ante la incomprensión. Paciencia ante los estereotipos y la ignorancia. Paciencia ante la lentitud con que a veces nos parecen los procesos. Paciencia en el paso a paso. Tienes todo para lograrlo. Un año más... Un paso más... TE MEGA SUPER AMO. D.A.A.A.

Somebody that I used to know

¡CIELOS! Cómo me gusta esta canción. "

Una breve reflexión de hoy.

El maltrato hacia los animales es lo más incivilizado, inhumano y perverso que hay. Quien no respeta la vida es un humano despreciable. Quien justifica la matanza es completamente estúpido. Los toros no nacieron para morir, alguien me dijo esto, ¿QUÉ? Vaya estupidez. Los elefantes no nacieron para estar en un circo, ningún animal debiera estar en ese "servicio" para entretener o divertir a tantos humanitos oligofrénicos. ¡NO! no a la investigación estética en vidas inocentes. Los perros no nacieron para pelear y matarse por entretenimiento aberrante, no nacieron para ser abandonados y agredidos por idiotas transeúntes. Las aves no nacieron para estar en jaulas ¡Tienen alas para volar! La sociedad que no respeta la vida, cualquier vida, es una sociedad violenta y violentada, condenada a repetir sus estupideces. Es una sociedad sin educación integral y sin consciencia. Desde la educación formal inicial en las escuelas debiera existir una asignatura específicamente pensada y planificada al respeto por la vida, cualquier vida. No basta con que exista la asignatura de Formación Cívica y Ética, que, siendo honestos, no se aborda adecuadamente. Las clases en la escuela primaria siguen siendo de consumo, es decir, donde los alumnos van a "recibir" nformación, no construyen ni producen su conocimiento. La primaria debiera ser la que genere competencias reales para la vida, para llevar el conocimiento más allá del aula. La educación en México no está funcionando, los resultados lo reflejan nítidamente. Lo que se aprende no es aprehendido, los alumnos no están siendo capaces de trasladar sus saberes a su vida cotidiana. ¿Y qué decir de la familia? Ese lugar que se antoja ideal para transformar la vida. Donde muchas veces se enseña que las mascotas (en su mayoría perros) son artículos de consumo, prescindibles y descartables cuando "estorban" las actividades propias de la familia; esa mascota es parte de la familia. No todos debieran tener perro en casa. Es un gran compromiso, una enorme responsabilidad que no se toma en serio. Y debiera ser todo un mar de aprendizaje por ese respeto que se ha perdido por los demás, animales incluidos.

Hoy.

Con permiso de su autor, les comparto estas líneas. Él las escribió temprano hoy, antes de ir a votar, de saber los resultados... "Bueno, en este momento se está viviendo una jornada electoral más en este país, independientemente del resultado creo que sería importante reflexionar sobre los mecanismos del poder y entender un poco que toda esta parafernalia de las elecciones es parte de un “teatro” donde participan muchos actores como el IFE, el pueblo, el gobierno, los medios masivos, las redes sociales, etc. Debemos entender que no “ganará” el candidato que tenga más votos, sino el candidato impuesto por los dueños del país, los empresarios, los dueños de los intereses comerciales y de los medios masivos. Por ello toda esta farsa llamada Democracia no es más que una completa falacia. En lo personal me da mucho coraje que nos quieran incluir en este circo invitándonos a participar con frases como “tu eliges que quieres para México”, “ejerce tu derecho como ciudadano”, etc, yo me pregunto, quién ha podido realmente acercarse a exigirle al candidato ganador que cumpla sus propuestas, intenten acercarse a los Pinos o al Palacio de Gobierno para que vean lo “abiertos y democráticos” que están para escuchar a la gente. Ya lo dijo el “sabio” Homero Simpson…”cuándo vamos a aprender que la democracia no funciona” (ver video a los 34 seg.) Felicidades para la gente que votará por el candidato “ganador” (por algo nos bombardearon todo este tiempo con miles de encuestas diciendo quién va ganando, para que no nos extrañe la victoria y digan “todo el tiempo estuvo arriba en las encuestas, era normal la victoria”, se sentirán satisfechos y creerán que realmente su voto influyó en esa decisión, y para el resto de las personas pues se sentirán defraudadas por el resultado al no ganar su candidato. Se rompieron amistades, se gastó una cantidad casi inmoral de dinero en propaganda política, pero al fin termina esta farsa de las campañas electorales. TAL VEZ NO LO CREAN PERO ME GUSTARÍA ACLARAR: NO CREO EN NINGÚN PARTIDO POLÍTICO NI SOY PARTIDARIO DE NINGÚN CANDIDATO."

El teacher

Realmente hay individuos, en todas las áreas, que se dedican a algo que no les gusta, hasta cierto punto es comprensible y muchas veces inevitable. La escasa oferta de empleos bien remunerados a veces te lleva por caminos que ni esperabas ni imaginabas. Quizá tengas que estar delante de una computadora todo el día, quizá debas archivar cientos y cientos de papeles, quizá debas atender personas... y si estás de malas la computadora no lo notará, los papeles no se inmutarán y las personas podrán ponerte en tu lugar. ¿Y qué tal que ese individuo frustrado se dice maestro de inglés? ¿Y si no es lo que quería hacer? ¿Y si debe atender a niños de 6 años? ¿ Y si cree que los niños son adultitos y ni idea tiene de cómo tratarlos? Pues ese es el caso de un fulanito que "enseña" inglés en la misma escuela que yo y para mi infortunio con mi grupo de primer grado. Probablemente el señor sí sepa inglés, pero de ninguna manera puede llamarse maestro: no sabe didáctica y sus estrategias de trabajo son absolutamente coercitivas y, por ende, tradicionalistas. Si llega de malas uuuffffff jetota segura, si llega con flojera sus pasos de caracol lo delatan. Sus maneras son tan, pero tan mamonas que me mueve hasta la absoluta repulsión, esto hace que quizá pueda tener algo de subjetividad mi punto de vista, pero lo que veo mientras da clase me supera. - Desconoce el proceso de pensamiento y desarrollo de los peques. - Da por sentado todo. - "Eso está muy fácil, lee" - contesta cuando le preguntan dudas. Y son pequeños de primero que están accediendo a la lectura y la escritura (en español, obvio) y necesitan apoyo y guía. - "No puedo hablarles en español, me lo prohiben" Eso cuando llega de mamilas, asunto que desconcierta a los niños porque no es congruente. Hay días en que les explica y traduce y otras en que los mira feo y no les hace caso, "I can´t speak in spanish" . - Se sulfura porque le piden permiso para ir al baño. - Se injerta en pantera porque se paran de su asiento. - Se engorila porque hablan. - Manotea, da palmadas y señala con sus feos dedotes mientras los fulmina con la mirada. - No dirige las actividades y casi nunca las revisa como debe ser. - Da sermones como si estuviera en un grupo de secundaria. - No busca los conocimientos previos de los alumnos ni hace cierre de clase, es un desorden total. - Brinca de temas, no hay un seguimiento y su clase es absolutamente aburrida. - Cuando les pone un disco no tiene más que el sentido de tener un "ruido" de fondo y que ellos se callen porque cuando estén en tercero le tienen que traducir lo que el disco dice: ¿WHAT? - No le gusta su trabajo, eso se nota, no es maestro y eso también se nota. El punto que tengo de comparación es enorme. Yo laboré en un colegio bilingüe tiempo atrás. Qué abismal diferencia. Ok, ok, entiendo que no es lo mismo tener a diario inglés llevando 6 materias a sólo tres horas semanales en la escuela pública. Pero antes de él había dos maestras totalmente comprometidas con su asignatura. La última que estuvo en mi grupo llevaba un seguimiento, era adorable, paciente, tierna y buscaba todas las estrategias posibles para que los peques aprendieran. Jugaban, cantaban, coloreaban, manipulaban material y les resultaba agradable. Lo que más detesto es cómo trata a los niños, su indiferencia ante ellos (es maltrato), sus desagradables gritos, su falta de interés, su hueva por preparar sus clases, jamás les lleva material, no se comunica con los padres de familia, casi todo el tiempo evita resolver dudas, su mamonería. En pocas palabras: es el ser humano más repulsivo que conozco. ¿Por qué está en esta noble profesión? Gentuza como él no dignifica al gremio, al contrario, lo mancha, lo deshonra y logra sustentar la generalización que la sociedad hace hacia los maestros. No valora lo que hace. FFIUUUU, casi logro sacar esta espinita. Si bien no me importan ni él ni su vida, sí me importan mis pequeñitos hermosos quienes no se merecen por maestro a un energúmeno mamón, jetón y deleznable como él.

50/50

Película sencilla, pero no simple. Premisa: conocida, desarrollo: agradable.
Buena película con un guión sólido e inteligente. No es moralina ni lacrimógena, es enternecedora y sin grandes aspavientos resulta reflexiva. Las actuaciones son excelentes al igual que la banda sonora.
Es una mirada a la amistad de a deveras, a la lealtad tan indispensable para hacer llevadera la vida, al amor incondicional y a la dignidad.
Me gustó mucho.
Una película de 9.

EL ARTISTA

Una total y absoluta obra de arte.
Maravillosa.
Película muda en blanco y negro. La pantalla no es panorámica, la dan en formato cuadrado, como debió ser en aquella época.
Es entrañable, conmovedora y agradable.
Es un homenaje al cine y para los que somos cinéfilos resulta una delicia, es gozosa y es llegadora hasta el tuétano.
Salí tan emocionada del cine, tan conmovida, que un par de horas más tarde todavía me brotaron algunas lágrimas al recordar partes de escenas magistrales.
El diseño de arte es soberbio, la banda sonora acompaña cada momento y las actuaciones son de primerísimo nivel.
También hay momentos de silencio total, donde los espectadores estamos pendientes de cada detalle, de cada transición, nada se oye, ni una palomita masticada, ni un respiro...
Es la película que te lleva a reflexionar acerca de la cima, el tope y lo que ocurre ante lo efímero. Es el análisis de lo humano, del orgullo, de la soledad, del amor desinteresado y del rescate.
Siempre será complicado moverte de tu zona de confort y aceptar lo nuevo requiere de un total ajuste donde se implica lo emocional y hay daños colaterales que no siempre podemos arreglar, sobre todo cuando los daños recaen en otros seres humanos que nos quieren, ¿serán capaces de perdonarnos y darnos una nueva oportunidad?
Esta película posee una estructura totalmente sólida, el guión es perfecto y está llena de detalles simbólicos que encuadran brillantemente la narración y lo que va ocurriendo.
El que sea cine mudo y en blanco y negro creará algo de retiscencia a verla de primera instancia, sobre todo para los espectadores no cinéfilos. Pero si se atreven, si se animan y le dan la oportunidad quizá logren extasiarse como lo he hecho yo.
Como decíamos con Paquiux, es de esas películas que cuando sales del cine, vas embelesado, con la emoción a flor de piel y como con ganas de agarrar al primer trnseúnte que te encuentres y decirle: "-Entre a ver esta peli, por favor, no se arrepentirá."
Esto es mi pasión, el cine y es parte de mi vida que me mueve a seguir adelante y aguantar las estupideces y la miseria de la sinrazón humana.
Es una película no de 10, de 20.
Es un tesoro que tendré que comprar en bluray inmediatamente que salga. Además de volver a ir al cine.
Amo esta peli ¿se nota?

La dama de negro.

Daniel Radcliffe creció como actor. Iba con la idea de que quizá me toparía aún con Harry Potter. Y no. Bien por él.
Me pareció buena película. Aunque nada excepcional. La historia va lineal, es entendible, no hay demasiadas explicaciones, aunque tampoco son indispensables.
Me imagino que verla en casa no surtirá el mismo efecto que en el cine. Una que otra escena es en verdad sorpresiva y te hace brincar de tu butaca. Hay algo de humor involuntario. La mayoría de las escenas son oscuras pero impecables. Tiene buena manufactura. La banda sonora no destaca, o por lo menos no me llamó la atención, pero no importa.
Las actuaciones, en general, fueron cumplidoras al igual que los efectos especiales.
De 5 estrellas, 3.

Hugo

¡HER-MO-SA!
Así, en una palabra, hermosa.
La vi en 3D y lo vale, mucho, en su idioma original, no doblada.
Para los que somos cinéfilos es una alegoría bellísima al amor por el cine, es resaltar el arte de este oficio cuando es bien realizado.
Es interiorizar y revalorar los acontecimientos de vida. Es el valor de la amistad, de redescubrir lo que te apasiona y atreverte a realizarlo.
Martin Scorsese logró una maravillosa película con una fotografía que raya en lo sublime. El diseño de arte es excepcional.
Asa Butterfield es el niño actor que da vida a Hugo. Qué adorable resulta. Transmite y te lleva de su mano en la realización de lo que parece imposible conectando cabos sueltos, uniendo lo que ni te imaginas en qué va a resultar.
Una película innegablemente de 10.

Los descendientes

Muy buena película.
Lo mejor: George Clooney y su hija adolescente (en la peli). Qué química la de ambos.
Lo peor: La banda sonora hawaiana.
Una historia lineal, pausada, lenta, pero deliciosa. Es la vida de una familia que vive junta pero que ni se conoce. Hasta que ocurre un nefasto accidente es que sus vidas cambian, se reacomodan y se ven forzados a salir de la zona de confort para entrarle de lleno a apoyarse y a aprender a quererse, a la vez que descubren que la tolerancia es el principio de la aceptación y el acercamiento.
No es una película para quien gusta del cine de acción y movidito. Es para irla saboreando escena por escena y descubrir que una gran historia ha sido contada. Sin moralina, sin juicios, sin crítica.
Una película de 9. Hubiera sido de 10, pero la banda sonora ¡auch!

J. Edgar.

Esta peli la vi con mi adorado Paquiux y eso es un plus extra, porque hasta las palomitas supieron más sabrosas, je je je.
Leonardo Di Caprio es un actorazo y como director Clint Eastwood está entre mis favoritos.
Una película no lineal que habla acerca del origen del FBI y de una vida complicada. Asumir la homosexualidad, en tiempos de mayor intolerancia y con una madre omnipresente debió ser tormentoso.
Es un análisis tras bambalinas del acontecer humano. Es lo ya sabido, dependiendo de quién la escriba, ese es el lado de la historia conocido.
Para mí, el lado humano del personaje fue de mayor importancia que lo ocurrido en las diferentes investigaciones criminalísticas. Fue una historia de intentar seguir con las apariencias mientras se iba manifestando la verdadera orientación amorosa y la persona depositaria de dicho amor.
Es una película entrañable, donde te olvidas de Di Caprio, ¡estás viendo a Edgar!
Excelente.
Y esas salas de Perisur son magníficas.
Una película de 10.

La mentira original.

Cambiándole canales a la TV me topé en Cine Canal con esta película que recién empezaba. Y me atrapó.
Es el mismo mundo que habitamos, con sus miserias, su pobreza, sus etiquetas y su organización, salvo por un pequeño detalle: nadie reconoce la mentira. Todos están, digamoslo así, programados genéticamente para decir siempre la verdad, al grado que en un banco puedes retirar tu dinero sin firmar ni comprobar nada. Ideal ¿no? Hasta que el protagonista se da cuenta que puede decir lo que no es. Un típico loser desganado, apocado y sin vida amorosa. Cuando dice su primera mentira empieza una vorágine de situaciones hilarantes. Es una crítica irreverente a la religión... a la belleza... a las etiquetas... a la estructura social... el final es complaciente, pero tiene muy buenos momentos reflexivos que la hacen valer la pena. ¡Ah! Y también tiene un desfile de grandes actores que la hacen disfrutable.
De 5 estrellas: 4 (por aquellos profundos diálogos filosóficos).

Un pedacito de cielo

Hasta el título es cursi. Sí, es una película cursi y algo moralina. Pero... me encanta Gael García y Kate Hudson es buena actriz. También es una agasajo ver a Kathy Bates. Eso es lo disfrutable de esta película que cuenta la misma historia que tantas otras. Se abusa de los sentimientos del espectador y cae en los lugares comunes para buscar la risa fácil. Pasará a la historia como cualquier otra.
De 5 estrellas: 2.5

Tenemos que hablar de Kevin

Una película que no da juicios, que no es moralina y para nada ligera.
Es desgarradora.
Tilda Swinton se come la película, qué gran actriz. Es contenida, puntual y con un gesto transmite más que con las palabras. Posee pocos diálogos, la fotografía se encarga de lo demás, como si fuera otro personaje de esta historia con una premisa espeluznante.
Es un viaje por la estructura social, es una crítica a la maternidad y una búsqueda del perdón en una situación donde se antoja imperdonable.
Es impactante, pero vale muchísimo la pena.
De 5 estrellas: 5.

¿Por qué yo no hice paro de labores?

Unión. Unión. No me la creo, no. Me parece que hay intereses personales de por medio y no es el momento histórico perfecto para ello. (Vaya que el 88 lo fue). No voy a generalizar, pero sí voy a hablar en general. Un movimiento que de social tiene poco y sí mucho de político.
Unión. De maestros que no trabajan en equipo y son capaces de sabotear alguna actividad de otro colega que no le caiga bien, todo a título personal. Existe una falta de madurez para respetar la no aceptación del mayoriteo.

No es personal.

Unión. Para el cotilleo, para descalificar, para ser impuntual en los horarios de trabajo y para tener faltas continuas.
Unión. Para decirles a los alumnos que no asistan a clases el día de reyes. Ya... ya... que se trauman los peques por hacer a un lado sus obsequios (los afortunados que los tuvieron) unas horas. Y ante la osadía de algún pequeño en presentarse dicho día a la escuela ¡Sopas! A recibir la mala cara de aquella docente que no los quería ver: -"¿Para qué vienes? Si yo quería dedicarme a rascarme el ombligo esas 8 horas de trabajo"-.
¡Unión! Para pedir que se nos deje salir temprano ese día de reyes porque no hay alumnos ¿así? ¿o más absurdo?
¡Unión! Para tomar café y ver: si pan o galletas pa' la junta.
¡Unión! Para pararse todos al mismo tiempo durante la junta a servirse el cafesito y las galletitas o lo que el paladar requiera e interrumpir, porque la panza apremia.
¡Unión! Para alargar almuerzos en esas juntas donde hay tanto qué hacer.
¡Unión! Para no hacer las obligadas guardias del recreo ¡que nuestro desayuno es más importante!

Y tal pareciera que he dado un monólogo algo derechista y en contra de mi gremio.
No es verdad.
No tenemos sueldazo ni reconocimiento social para esta sagrada y necesarísima profesión. Estamos demeritados y hacen con nosotros lo que se le dé la gana al sistema que igual nos tiene agarrados a su economía.
Somos parte de esa infraestructura que sostiene dicho sistema, no somos un ente aparte.
Somos también ese lado anestesiado para evadir el dolor del abuso, de la desigualdad y de nuestras preocupaciones personales.
También llegamos a sentir esa apatía por el prójimo. Mentira que una marcha nos una. Hay profesores dispuestos a pisotear a sus colegas y aquellos que después de la marcha seguirán haciendo como que trabajan (Insisto, no es general, pero sí he visto muchos casos).
¡Mentira que todos hayan ido a la marcha! Pararon en sus casas y será un día de "asueto" bastante caro. Ese no es apoyo.

A título personal estoy cansada. Mi situación particular no me impulsa al paro. No tuve ganas de entrarle ni tampoco ganas de un descontón en mi salario porque soy jefa de familia con un crédito hipotecario altísimo.

No creo ya en las negociaciones. Las empresas mandan y gobiernan. Las grandes corporaciones deciden el rumbo de los países y a los dirigentes que ocuparán el lugar de representación y lo que ha de hacerse para seguir teniendo a la población en una inconsciencia y adormecida.

Después de casi 25 años de labor como docente me sigue gustando, es más, sigo amando lo que hago. Pero cada día me desencanto un poquito. Al grado de pensar en un plan B y mandar todo al diablo o de plano hacer la retirada del magisterio apenas pueda.

Ni hablar. No es momento para mí. No.

Maestros locos.

Hoy mi director me hizo llegar un correo electrónico que me gustó mucho. ¿Por qué? Porque me identifico con lo que dice. Yo soy de esas maestras "locas" que disfrutan su trabajo, y ustedes lo saben. A continuación lo copio:
Esos locos que enseñan. Yo los conozco. Los he visto muchas veces. Son raros. Algunos salen temprano por la mañana y están en el colegio una hora antes,otros salen del colegio una hora más tarde porque tienen entrevistas con los padres que trabajan y no pueden acudir a otra hora, otros recorren todos los días más de 50Km de ida y otros tantos de vuelta. Llueva o truene llegan al trabajo. Están locos.

En verano les dan vacaciones, pero no se desconectan del todo, piensan en sus clases, preparan tareas para el semestre siguiente. En invierno hablan mucho, siempre llevan caramelos de miel y limón en los bolsillos, otros con una botella de agua a su lado. Su garganta siempre está dolorida, pero siguen enseñando, siempre fuerzan su voz, pero siguen transmitiendo sus conocimientos con cariño e ilusión.

Yo los he visto, no están bien de la cabeza. Salen de excursión con sus alumnos y se encargan de gestionar autorizaciones, recoger el dinero, en otras palabras, asumir responsabilidades extra.

Qué será de ellos y ellas. Por la noche sueñan con el colegio, se les aparecen planetas, ecosistemas y personajes históricos. He escuchado que llegan cargados con cuadernillos y exámenes, que han corregido la tarde anterior en su casa.

Son mujeres y hombres, casados, solteros,...de diferentes edades, pero a todos les apasiona su trabajo, ver crecer a sus alumnos, ayudarlos y conseguir de ellos ciudadanos competentes.

Los he visto muchas veces. Están mal de la cabeza. Algunos dicen de ellos que viven muy bien, pero les han recortado el sueldo y siguen trabajando incluso más que antes, algunos no miran ni su nómina porque su pasión por la enseñanza los hace ciegos a pensar en el cobro. Disfrutan con lo que hacen, aunque haya padres que no los valoren, les critiquen e incluso les quiten autoridad, (a veces hasta les agreden), pero ellos siguen hacia adelante.

Están mal; por las tardes se quedan para hacer cursos de formación y no les importa perder tiempo de su ocio para reciclarse.

Dicen que son autocríticos y que hacen balance de sus experiencias educativas, que se frustran cuando no salen las cosas como esperaban,
que se alegran cuando sus alumnos avanzan.

Están mal de la cabeza, yo los he visto. Dicen de algunos que fueron muy importantes, que siempre tienen palabras de aliento; dicen sólo que son MAESTROS y que se sienten MUY ORGULLOSOS DE SERLO.